Cuando hablamos de ansiedad nos estamos refiriendo, desgarciadamente, a una experiencia que ha penetrado nuestras vidas cotidianas y es ya algo comun que todos, de una forma u otra, sentimos -sino diariamente- a lo menos frecuentemente.

La ansiedad tiene algo de miedo, de tensión, de presión interna, de nerviosismo. Pero la ansiedad no es solo miedo, ni es solo tensión interna. La ansiedad es un sufrimiento interno inespecífico, es experimentar un vago sentimiento de malestar e intranquilidad, es una apprehension a veces no asociada a nada, es una tension o stress continuo que influye y puede llegar a interrumpir nuestra vida de relaciones familiares, laborables, sociales y que a veces nos deja sin fuerzas para andar o desandar los caminos mal andados.

La ansiedad que experimentamos puede provenir de muchas fuentes. April and Vincent O’Connell plantean que esas fuentes se pueden reducir a tres:

1. la ansiedad proveniente de la propia realización en la vida;

2. la ansiedad proveniente del medio ambiente social; y

3. la ansiedad global.

La primera, la personal, incluye nuestras relaciones con la familia y en general con nuestros amigos, asociados o compañeros de trabajo, asi como de nuestra propia ubicación y realización en la vida. Aqui estamos hablando de la propia salud, del contenido y el esfuerzo por mantener una buena situación en el trabajo, de las altas y bajas necesarias para mantener buenas relaciones matrimoniales que sean respetuosas de la individualidad de los miembros de la pareja y al propio tiempo que sean cohesivas, de las relaciones familiares que permitan a la familia crear el sentido de pertenencia que va más allá de tener familia y que se define como ser familia. Es la ansiedad que provoca la problemática diaria que siempre ha existido y que existira -la que está fuera del alcance de nuestro control.

El segundo grupo de ansiedades es la ansiedad que proviene de tratar de vivir de acuerdo a las expectativas y valores de la sociedad en la que nacimos y crecimos o en la sociedad que hemos elegido -o nos han elegido- para crecer y desarrollarnos. En el presente, desgraciadamente, muchos de nosotros pensamos cuando hablamos de expectativas y valores que nos estamos refiriendo a tener y a incrementar nuestros bienes materiales. Es decir, tener y no ser. De un forma o de otra, todos nosotros tenemos algo que hacer, un papel que desarrollar en la sociedad en la que nacimos o en la que vivimos.Todos nosotros hemos sido llamados a contribuir con nuestras acciones personales al bienestar de nuestra comunidad.

La comunidad humana tiene tres valores fundamentales para su buen funcionamiento: el respeto a si mismo y a los demas; la habilidad de tomar de decisiones basadas en relaciones justas de los unos para con los otros, y la participación responsable en la construcción y en el mantenimiento saludable y eficiente del grupo comunitario. Cuando no estamos a la altura de estas expectativas y valores empezamos a sentir ansiedad social. Podemos entonces hacer dos cosas, o bien luchamos para estar a la altura de lo que se espera de nosotros, o aislarnos y marginalizarnos, o peor aun, vivir sin respetar las leyes de la convivencia pacífica y vivir asi de espaldas a las regulaciones que mantienen la productividad y la armonía de la comunidad.

Finalmente esta la ansiedad grobal… tal vez la ansiedad más común hoy en dia debido a las circunstancias en que nacen, crecen y viven nuestros hijos y nosotros mismos. Esta asiedad fue calificada por algunos filósofos y psicólogos como ansiedad existencial –por el solo hecho de existir la padecemos, no importa donde vivamos. Nos pertenece por el solo hecho de ser seres humanos. Es la ansiedad de proviene de los diferentes males que sufre la humanidad: de el abuso –fisico, emocional o psicologico, y sexual- de la explotación y trata de seres humanos – de niños, mujeres y hombres, del comercio y consumo de la droga, de las disputas ideológicas y territoriales que existen en todos los continentes, del terrorismo internacional, de la falta de respeto entre las naciones y las culturas, de los fenomenos naturales tales como ciclones, erupcion de volcanes, … en resumidas cuentas, de la inabilidad del hombre para mantener la paz y por controlar sus condiciones ambientales. Es el resultado de la lucha del hombre por ser el conquistador, un conquistador que ha terminado convirtiéndose en victima de sus desordenes.

Esta ansiedad existencial se ve reflejada en los tres grandes temores han azotado a la humanidad desde sus inicios, el temor a la muerte, el temor a la locura –o a la enajenación de la realidad individual y social- y el temor a la guerra.

La pregunta logica al final de esta descripción es, qué podemos hacer para vivir cada dia con estas ansiedades, algunas de las cuales se escapan a nuestro control. Los estudiosos de la materia recomiendan:

1. Necesitamos conocernos y aceptarnos a nosotros mismos de la mejor forma posible. Como consequencia lógica de este conocernos, está aceptar que somos personas con limitaciones. Todos tenemos limitaciones. Pero tambien somos personas con recursos y abilidades. Recursos y abilidades que estan ahi puestos para ayudarnos a ser y hacer lo que se espera que hagamos en la sociedad. Y son esos recursos y abilidades los que estan ahi para ayudarnos a trascender nuestras condiciones personales que nos frenan y nuestras limitaciones personas que en muchas oportunidades no podemos superar. . Es decir, el requisito primero para tener una personalidad integrada y sana es tener una adequate autoconciencia y autovaloración.

2.Necesitamos reconocer y aceptar nuestra responsabilidad en la vida. La que tenemos con nosotros mismos, con nuestra familia, con nuestra comunidad. No puede haber una persona equilibrada si esta no es responsable. Recordemos que la palabra responsabilidad significa ser capaz de hacer lo que se espera que se haga de acuerdo con las circunstancias y el papel que se tiene en la vida.

3. Busca y haz tu camino en la vida. Se dice que nadie nace de gratis. Todos tenemos un lugar que ocupar, todos tenemos una tarea que hacer. Y si no la hacemos se queda sin hacer. Cada camino a recorrer es unico. Por eso tener metas objetivas en la vida es de vital importancia para crecer de forma armónica siendo quienes somos, en familia y en comunidad.

4. Alejemos de nuestra mente y de nuestro corazon los momentos .de angustia, de fracasos, de errores que hayamos cometido. en nuestro proceso de crecer. Recordemos que la vida trae una cuota de dolor y una de alegría para cada uno de nosotros. Muchas veces nos quedamos disfrutando tanto lo que hemos sufrido que no somos capaces de descubrir la cuota de alegria y de satisfacción que nos está esperando a la vuelta de la esquina.

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Dr. Gelasia Marquez is an immigrant clinical and bilingual school psychologist. Dr. Marquez has studies, researches, articles, and programs aimed to help immigrant Hispanic children, adolescents and families in their processes of transition after migration

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