La relación entre padres e hijos es la relación interpersonal más significativa para las pesonalidades en formación, es la que mayor influencia ejerce en la salud mental de los hijos. Ahora bien, la actitud que los padres tienen hacia sus hijos suele estar influída en gran parte por su propio grado de satisfacción y de conformidad que ellos han logrado obtener en sus propias vidas. Por eso no es raro que los padres transplanten a la relación con sushijos los conflictos no resueltos que surgieron en la relación con sus propios padres. Las hostilidades y los resentimientos que provienen de tal fuente, pueden formar p llegarte -generalmente a ninvel inconsciente- de las relaciones que estos nuevos padres establecen con sus hijos y el resultado de estas relaciones ejerce un efecto nocivo sobre el crecimiento y el desarrollo social de los hijos.

El cuidado excesivo de los hijos es mucho más frecuente que el descuido pero los resultados son igualmente nocivos. La sobreprotección en todas las fases de la vida infantil incluyendo vestido, salud, comidas, juegos y asociación con otros niños, impide que ests desarrollen la independencia, la responsabilidad social, y la madurez de sus personalidades esenciales para lograr una adaptación adecuada. Los padres excesivamente solícitos, en su angustia para proteger a sus hijos contra daños reales y daños imaginarios, suelen reprenderlos y amonestarlos constantemente. Las investigaciones relacionadas con este tópico suelen reflejar que estos hijos protegidos de todos los riesgos normales y habituales de la vida se vuelven dependientes, infantiles y con frequencia hostiles. Al carecer de la plena satisfacción de los placeres asociados con la niñez suelen ser llorones y a veces mentirosos.

Al pasar los años siguen tratandoloscomo si fueran indefensos niños que no saben enfrentar la vida y necesitan la continua conexión con los padres para tomar decisiones y administrarse en la vida con responsabilidad. Crecen estos hijos no como personas responsables sino como personas parcialmente responsables y asustadizas ante las normales demandas de la vida y de la sociedad.

Levy señala que los padres sobre protectores educan al niño de forma indulgente o dominante. Los hijos de padres sobre protectores indulgentes prolongan sus demandas y sus esperanza infantiles en lugar de sobrepasarlas conforme se acercan a nuevas etapas de sus vidas. De ahi que resulta difícil disciplinarlo en otras situacione sociales (escuela, grupos juveniles) y su conducta se caracteriza por desobediencia, berrincles, una acitutd exigente de tipo agresivo y diversos grados de conducta tiránica.

Los problemas que se presentan en los hijos de padres sobreprotectores dominantes son principalmente patrones de angustia, actitudes de miedo, timidez y conducta sumisa. En ambos casos la sobreprotección actúa comtra las influencias externas que hacen que los hijos crezcan y lleguen a adaptarse en la sociedad.

Publicado en el periódico El Sol de la Florida, 14 Noviembre 1981.

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Dr. Gelasia Marquez is an immigrant clinical and bilingual school psychologist. Dr. Marquez has studies, researches, articles, and programs aimed to help immigrant Hispanic children, adolescents and families in their processes of transition after migration